Miradas del Puerto y la Ciudad

Como parte del proyecto de Corredores Culturales, Matucana 100 te invita al ciclo  “Miradas del Puerto y la Ciudad”: Ocho filmes- cuatro nacionales y cuatro internacionales- cuyos protagonistas exploran e intiman con el puerto y la ciudad. El proyecto Corredores culturales está integrado por el Centro Cultural de San Antonio, el Parque Cultural de Valparaíso, el Centro de San Joaquín, el GAM y  el Centro Cultural Matucana 100.

17 de noviembre | Midnight Cowboy, de John Schlesinger. Estados Unidos, 1969. 123 minutos.

18 de noviembre | La mujer del puerto, de Arturo Ripstein. México, 1991. 100 minutos.

19 de noviembre | Querelle, de Rainer Werner Fassbinder. Alemania, 1982. 120 minutos.

22 de noviembre | Madame Sata, de Karim Ainouz. Brasil, 2002. 105 minutos. 

24 de noviembre | Ya no basta con rezar, de Aldo Francia. Chile, 1972. 80 minutos.

25 de noviembre | Educación física, de Pablo Cerda. Chile, 2012. 105 minutos.

26 de noviembre | Play, de Alicia Scherson. Chile, 2005. 100 minutos.

29 de noviembre | La luna en el espejo, de Silvio Caiozzi. 70 minutos.

LOS FILMES

Midnight Cowboy (Con Dustin Hoffman, Jon Voight y Brenda Vaccaro)

Soñando con el éxito como cowboy de exhibición, el joven e ingenuo tejano Joe Buck (Jon Voight) se traslada a Nueva York, donde comienza a trabajar como gigoló seduciendo a mujeres maduras de Manhattan. Joe pronto descubre que ese mundo no es como él se imaginaba, pero antes conoce a Rico “Ratso” Rizzo, un timador que lo quiere estafar.

La mujer del puerto (Con Patricia Reyes Spíndola, Alejandro Parodi y Evangelina Sosa)

Perla es una exótica bailarina que se prostituye en un burdel del puerto, obligada por su madre. El Marro (Damián Alcázar) es un joven marino enfermo, fascinado por la belleza de la chica. Pero la madre de Perla (Evangelina Sosa) intenta por todos los medios apartarlos debido a razones inconfesadas e inconfesables.

Querelle (Con Brad Davis, Franco Nero y Jeanne Moreau)

La tripulación del “Vengeur” se prepara a celebrar su llegada en el puerto de Brest, lugar donde el marinero Querelle ejercerá  un enorme poder de fascinación y de seducción sobre las personas que conoce; posee un atractivo y una personalidad irresistibles.

Madame Sata (Con Lázaro Ramos, Marcelia Cartazo y Flavio Bauraqui)

En los años treinta, João dos Santos era pobre, hijo adoptivo, negro y homosexual confeso. Su ficha policial sumaba tres mil peleas y tres homicidios. Decía que no peleaba, se defendía. Esta es su historia en la ciudad de Río de Janeiro.

Ya no basta con rezar (Con Marcelo Romo, Tennyson Ferrada y Leonardo Perucci)

La película retrata, en años previo al triunfo de la Unidad Popular, el proceso interno de un sacerdote católico que, enfrentado a las injusticias que observa en el entorno parroquial y ante la indolencia de la jerarquía eclesiástica, decide emprender por su cuenta el cambio social.

Educación física (Con Pablo Cerda, Tomás Vidiella y Carmen Fillol)

Exequiel es un profesor de educación física que vive en San Antonio con su padre, en su casa de siempre. Es un hombre sencillo, que dejó pasar oportunidades y movimientos y ya no los está buscando. La vida de este profesor necesita encenderse: un reencuentro con un antiguo amor, tristezas, esperanzas. Está en el pleno replanteo de la mediana edad: ¿Qué hice con mi vida? Y, más importante, ¿qué voy a hacer?

Play (Con Viviana Herrera, Andrés Ulloa y Aline Kuppenhein)

Un día de verano, Tristán pierde el maletín y el amor. Al día siguiente, Cristina encuentra una aventura. Cristina y Tristán caminan por un Santiago caluroso y contaminado. Él tratando de recobrar algo que nunca tuvo, ella siendo la testigo silenciosa de su caída. “Play” es una fábula urbana, una pequeña canción pop sobre un hombre que busca y una mujer que encuentra.

La luna en el espejo (Con Luis Alarcón, Schlomit Baytelman y Juan Cristóbal Meza)

En el mágico puerto de Valparaíso, un viejo y enfermo marino, Don Arnaldo, vive encerrado junto a su obediente y sumiso hijo, El Gordo. Desde su cama controla todos los movimientos de la casa a través de los espejos de su dormitorio. Pero el Gordo quiere ser libre de una vez. Cuando conoce a Lucrecia encuentra por fin la fuerza para salir de su encierro. Pero esta rebeldía pone furioso a don Arnaldo, que hará lo imposible por recuperar el control sobre su hijo.