La Cosa Nostra

La Compañía La Mancha busca nuevamente hacer reír al público a través del estreno, el próximo 11 de junio, de la Cosa Nostra, un espectáculo  que combina el clown y la tragedia griega , una mirada que resalta lo absurdo de la política actual,  una mirada analítica para reírse de la política y los políticos.

Con el estreno de “Arriba de la pelota”, el año 2008, la compañía La Mancha inició un ejercicio de sátira y humor crítico hacia temas de contingencia nacional. En esa oportunidad, The Clinic fue la inspiración para un espectáculo con un potente atractivo visual, con 30 bufones en escena que se burlaron de la sociedad chilena utilizando las temáticas y el lenguaje característicos de esta publicación. El resultado fue una temporada teatral donde el público se rió de personajes televisivos como Felipe Camiroaga y Tonka Tomicic, y donde ironizó acerca de conceptos como el patriotismo (modificando la canción nacional) y la educación pública. Se trataba de realizar una sátira acerca de nosotros mismos como sociedad.

En “La Cosa Nostra” el foco de crítica social está dirigido hacia nuestros representantes. En un contexto de debates y polémicas políticas, una propuesta escénica basada en la estética del clown combinada con elementos de tragedia griega es una grata oportunidad para reflexionar con humor sobre nuestros gobernantes. Con un texto cómico arraigado en el absurdo llegamos a escena en el año 2030. El Estado de Chile  ha tomado la decisión de volver al origen de la República, a los padres de la Democracia, a los ancestros occidentales que nos dieron el ejemplo de Estado, al mundo grecolatino. Es  así como la obra se desarrolla en  un senado romano-  chileno donde se debaten los grandes temas país, que siguen siendo los mismos de hoy, que se han prolongado en el tiempo sin solución.

El montaje nos muestra una sesión  que estará llena de coreografías corales, intervenciones musicales (en vivo) y situaciones que llevan a escena  una óptica muy particular de  la realidad política de nuestro país y nuestro continente, donde lidiamos con el intento de solucionar problemáticas insolucionables con mecanismos insospechados, una política llena de personajes excéntricos, polémicas innecesarias, plagada de intereses creados que se alejan totalmente de los intereses de la ciudadanía y sobre todo de la juventud.